diumenge, 24 de març del 2013

Dentistas

Convalesciente todavía de mi ya improrrogable visita al dentista, hoy os puedo hablar sobre la fama de los odontólogos brasileños.

Por lo que he podido leer por ahí (http://www.abo.org.br/espanol/dentistry.php) , esta profesión ya era practicada por los indígenas, aunque por lo que se sabe, ellos tenían buenos dientes. Fue con la llegada de los portugueses cuando se hizo necesaria la regularización de esta profesión, ya que, hasta entonces, con el augmento de la población, se había llegado a una necesidad elevada de personal que desempeñara esta profesión, que por aquel entonces, ejercian los propios barberos! (y parteras) A partir de la Carta Regia de 1631, se precisaban dos años de preparación y pasar un examen para poder realizar extracciones dentales.

Como ya sabemos, Brasil es uno de los paises donde las operaciones de estética para tener cuerpos 10 están a la orden del día. Los mejores profesionales al servicio del negocio del "culto al cuerpo", como el conocido Dr. Pitanguy (http://www.biografiasyvidas.com/biografia/p/pitanguy.htm), que tiene su famosísima clínica en Rio de Janeiro, trabajan en sus consultas en São Paulo, motivando tanto el consumo interno de este tipo de cirujias, como fomentando el turismo estético (http://belleza.excite.es/brasil-se-convierte-en-el-destino-preferido-del-turismo-estetico-N24958.html), a ritmo de carnavales y samba.

"Es el llamado turismo estético que, en los últimos años, se ha convertido en todo un filón para países como Brasil en los que, cada año, se realizan más de 700.000 intervenciones de este tipo. De ellas, unas 35.000 son practicadas a pacientes extranjeros que viajan al país sudamericano con el único objetivo de mejorar su cuerpo. Un boom estético que comenzó en la primera década de este siglo y que en los dos últimos años se ha incrementado en un 65%. "

Más referecias sobre el turismo estético:


Hoy quería hablaros del negocio de los dentistas...

Justo antes de marchar hacia aquí, tuve que ir de urgencias a mi dentista de referencia. Me extrajo una muela que se me había partido por causas de una mala ondodoncia de hacía años atrás (bueno, en realidad podríamos computar décadas.... args!!!) En fin. Yo tengo páaaaaaaaaaaaniiiiiiiico a los dentistas, por causas que ahora no vienen a caso, razón por la cual soy muy reticente a visitar un dentista, y menos si no me duele nada. Como conclusión: sólo piso la consulta de estos profesionales cuando la cosa ya no da más de si... y ese fue el caso hace dos años: entré en consulta, me sugirieron sacar la pieza y, una hora más tarde, cuatro chutes de anestesia infructuosa y un baño de sudor de angustía después, salí de la consulta sin ella, directa al sofá de mi casa, a intentar recuperar las fuerzas físicas, puesto que la adrenalina segregada en la consulta me había dejado KO...

En aquella ocasión, dado mi miedo al gremio, y mientras esperaba que la anestesia que me iban suministrando hiciera efecto, con la idea de rebajar la tensión acumulada, fuí hablando con mi dentista, contando que en breve tenía que venirme a Brasil para vivir, y que dadas las circunstancias, de que sería necesaria una reposición de la pieza extraída, esperava que me hablara un poco de las opciones que tenía. Cual fue mi sorpresa cuando me habló de que aquí, en Brasil, existen los mejores profesionales de la odontología, incluso hasta tal límite que él mismo iba a realizar unas estancias ese mismo verano en el país, para hacer unos cursos de especialización...

Así pues, sabía que aquí encontraría buenos profesionales. Y así ha sido.

De nuevo, ha hecho falta llegar a un nivel de complicación dolorosa de una muela para decidirme a pisar una consulta. Me decidí por una cercana, y aunque sin referencias directas, me pareció una buena opción y allí que me fuí.

Resumiendo rápido y fácil: aquí las cosas se hacen de manera muy diferente, mucho más caras, si, pero con muchísimos más protocolos de higiene y garantías de seguridad que allí.

Para empezar, aquí me vieron diferentes profesionales, en función de la especialización de cada uno, y aunque algunos no visitan en sábado, como es el único día que puedo ir sin la tropa, cambiaron su agenda para poder atenderme. 

La primera doctora que me atendió, me mandó hacer unas pruebas en otro centro, antes de hacer nada, y a partir de tener la ortopantonografía, pasé por diferentes doctoras, me hicieron un cuestionario de salud, me hicieron firmar un documento de información y otro de consentimiento de cirugía.

El proceso de extracción en si lo trataron como una cirugía ambulatoria, pero supuso puntos de sutura y cauterización con láser.. Al terminar, me quedé tan impresionada por todo el proceso que no pude evitar comentar como me habían realizado la extracción dos años antes y la diferencia con aquello... Ella no podía creer que me hubieran sacado la muela, sin más, sin puntos, sin antibiótico ni analgésicos ni recomendaciones par evitar una infección... La verdad, no se quien se llevó la impresión de ser un país tercermundista... bueno, si lo se :p

El caso es que ahora tengo un montón de visitas programadas para los próximos sábados, para revisar y sacar los puntos, para empezar con la reposición de la pieza y, como no, para intentar ponerme aparatos correctores... ya que, no olvidemos, estamos en el país donde la estética es importante y un negocioooooooooo


3 comentaris:

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    1. Hola Montse! Me encanta leer comentarios! Estoy de acuerdo contigo.

      Mi entrada no es tanto para discutir el método de extracción (quizás no me expliqué del todo bien, porque en ambos casos fue sacada con pinzas y no se realizó ninguna incisión, por lo que no acabo de entender porque lo llaman cirugía ... pero bueno). Viene más a comentar lo que aquí me hicieron antes (consentimiento del proceso, información sobre las posibles complicaciones, los cuidados que debía tomar los días siguientes, etc.) y después (los puntos de sutura que se me dieron, la cauterización con laser, el recetarme antibióticos...) que allí no se hizo.

      Dónde fui a hacerme eso en casa?? pues en la clínica dental (hay dos) de done yo vivo, que son muy agradables y atienden muy bien...

      Pero lo que quiero resaltar con esta entrada es que, a veces, los prejuicios que tenemos son muy poderosos. Hablamos con mucha facilidad de paises que, directamente, consideramos tercer mundistas, y en base a eso nos sentimos seguros y con derecho a afirmar ciertas cosas.

      Hace unos años, tube la suerte (y la casualidad) de tener ayudándome en casa a una chica brasileira. Ella era infermera, pero en España no le reconocían el título, por lo que pasó de trabajar en un hospital a trabajar para casas particulares. En ese momento pensé: claro! es que vete tu a saber como consiguen el título y cuanto de exigentes son con los estudiantes fuera de Europa o los Estados Unidos...

      Ahora pienso, será que en Europa hacemos las cosas diferentes, y eso quiere decir mejor? de donde sacan las experiencias positivas y las buebas prácticas en Europa? De qué paises? Será que en otros paises, léase Brasil, hay una muy buena calidad de profesionales y que la inseguridad en Europa hace menospreciar la preparación de muchos de ellos?

      Para muestra, un botón. En Brasil hay muy buenos dentistas, muy buenos cirujanos de estética y, en el mundo de la maternidad, en el que más me muevo yo, hay personas sobradamente preparadas, con ideas frescas pero, sobretodo, muy motivadas...

      Porque en este país hay tanto por hacer! que se saben parte activa del motor de cambio...

      Quizás eso es lo que le falta a Europa, apoltronada en el asiento de "estos son mis derechos"....

      quizás la crisis consiga despertarnos y abrirnos los ojos... no lo se...

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